Primeros años de Martí en el periodismo
Los primeros pasos de Martí en el periodismo acontecen a muy temprana edad (16 años) en su querida Cuba. Junto a su amigo Fermín Valdés Domínguez crean el periódico El Diablo Cojuelo –publicado el 14 de octubre de 1869– y, una semana después, La Patria Libre, en el que participarían su maestro Rafael María de Mendive y Cristóbal Madan.
La estancia de Martí en México, entre 1875 y 1876, es considerada la de su efectiva incursión en el mundo del periodismo profesional por su exitosa y profunda participación en la Revista Universal en la que, bajo el seudónimo de Orestes, escribía artículos y crónicas acerca del mundo parlamentario, el teatro, el arte. Colaboraba con El Socialista y El Federalista. Durante la estancia de Martí en Guatemala, entre 1877 y 1878, además del ejercicio de la docencia desarrolla una gran actividad en distintos campos de la creación. Escribe el drama indio Patria y Libertad, Los códigos nuevos, y ofrece conferencias y discursos. Sus textos aparecen en el periódico El progreso.
En agosto de 1878 regresa a Cuba. Durante su corta permanencia desarrolla actividad docente y profesional, y es muy activa su participación en la concepción de los procesos independentistas de la Isla. En el campo de la creación destaca en el Liceo de Guanabacoa, institución cultural para el fomento de las letras, las ciencias y las bellas artes. En El Progreso reseña actividades de esa importante institución de la cultura cubana. El 3 de enero de 1880 llega a Nueva York e inicia la primera etapa de su labor periodística en los Estados Unidos, como crítico de artes en The Hour y en The Sun. Charles Dana, director de The Sun, afirmó que Martí: “tenía sólidos y extensos conocimientos, y sus ideas y conclusiones eran brillantes y originales”.
El periodismo latinoamericano y el venezolano en la segunda mitad del siglo xix y la incursión de Martí en ese mundo
Hasta las primeras décadas posteriores a la declaración de independencia de los países de América, se practicaba un periodismo llamado “doctrinario”, en tanto su actividad consistía en la orientación de la política de las repúblicas emergentes. Ya, a finales del siglo xix, comienza un periodismo “informativo” relacionado con un modelo asociado al mercado de la información, al nacimiento de géneros periodísticos modernos y la “autonomización del campo intelectual en general”.
Hubo otros factores que apalancaron el empuje de la prensa en esos años: público lector cautivado por la prensa e innovaciones tecnológicas que contribuían a la modernización de la producción, mayor tiraje y difusión de las ediciones e inmediatez en la transmisión de las noticias. La implantación de la imprenta a vapor, la linotipia, el desarrollo del telégrafo, del cable submarino, del teléfono, de la electricidad; el desarrollo de medios de transporte como el ferrocarril y la navegación a vapor. Se facilitaron también la incursión del aviso publicitario, la ilustración y la fotografía.
En el periódico Patria, en 1892, Martí publicó algunas ideas acerca del periodismo. El maestro, con mucha erudición, nos orienta en torno a las misiones del periodismo: “que no haya una manifestación de la vida, cuyos diarios accidentes no sorprendan al diarista”; “Que un periódico sea literario no depende de que se vierta en él mucha literatura, sino que se escriba literariamente todo. El periódico debe estar siempre como los correos antiguos, con el caballo enjaezado, la fusta en la mano, y la espuela en el tacón. Al menor accidente, debe saltar sobre la silla, sacudir la fusta, y echar a escape el caballo para salir pronto y para que nadie llegue antes que él”; “Debe, extractando libros, facilitar su lectura a los pobres de tiempo. O de voluntad o de dinero”; “Debe ser coqueta para seducir, catedrático para explicar, filósofo para mejorar, pilluelo para penetrar, guerrero para combatir. Debe ser útil, sano, elegante, oportuno, saliente”.
José Martí, colaborador de La Opinión Nacional, de Caracas
José Martí llega a Caracas en enero de 1881 y aquí va a permanecer hasta finales de julio de ese año. Venezuela no estaba ajena a los procesos de constitución de un periodismo de carácter informativo. Lo doctrinario quedaba, en la mayoría de los casos, para la nota editorial de los periódicos. En ese contexto, el periódico La Opinión Nacional, dirigido por Fausto Teodoro de Aldrey, da la oportunidad a José Martí de que desarrolle allí su trabajo y facilita sus talleres para imprimir la Revista Venezolana, creada por Martí. La Opinión Nacional aparece por primera vez el 14 de noviembre de 1868. Circuló hasta 1892. Su edición estaba a cargo de la imprenta regentada por Aldrey. Se le consideró órgano de difusión del liberalismo y del gobierno del presidente Antonio Guzmán Blanco. Fue el primer periódico venezolano en introducir la imprenta de vapor, su nivel informativo era alto y mantenía a los venezolanos al día de los acontecimientos nacionales e internacionales.
En la obra periodística de Martí destaca la crónica, además del ensayo, la semblanza y el artículo de opinión. Todo dentro de un estilo donde condensa el cuidado por la investigación, el conocimiento de los hechos, la reflexión, la elegancia y la expresión culta y hermosa. El 15 de junio de 1881 aparece el primer trabajo de Martí en el diario caraqueño: El centenario de Calderón. Primeras Nuevas, y el 28 de junio de 1881: El centenario de Calderón. Últimas Nuevas.
José Martí, corresponsal de prensa de La Opinión Nacional en Nueva York, escribe Las Cartas de Nueva York y la Sección Constante
Después de la salida de Venezuela, el 28 de julio de 1881, inicia a lo largo de varios meses una sólida relación con el país y lectores a través de sus crónicas escritas en Nueva York como corresponsal de La Opinión Nacional. Desde esa ciudad escribe y envía a Venezuela sus célebres Cartas de Nueva York y la Sección Constante, trabajos periodísticos que serían los comienzos de las tan conocidas Escenas Norteamericanas y Escenas Europeas. La Opinión Nacional sería faro de esa inmensa creación martiana, gracias a la cual el público lector venezolano se mantuvo informado de acontecimientos e importantes adelantos de la época. A Martí se le considera el latinoamericano mejor informado de la situación estadounidense y mundial. Fijar residencia en Nueva York y tener acceso a grandes y bien documentados medios de información de ese país y de otros del mundo, y su gran formación, sólida cultura y conocimiento de varios idiomas, le permitió aportar vastos conocimientos e información a la América Latina y El Caribe. Sus crónicas en el diario caraqueño abordaban temas de impacto social: política, conflictos sociales, filosofía, adelantos culturales, vida de grandes creadores, entre otros. El primer número de Las Cartas de Nueva York, fechado en esa ciudad el 20 de agosto de 1881, se publica unos días después en Caracas, el 5 de septiembre.
En La Opinión Nacional pueden leerse enjundiosos trabajos de Martí sobre grandes personajes de la política, la literatura, la filosofía y el arte de aquellos años. Así podríamos citar el publicado el 19 de mayo de 1882 sobre la muerte de Emerson, el gran filósofo estadounidense y la reseña de la visita del poeta Oscar Wilde, entre otros.
La Opinión Nacional publica, el primero de octubre de 1881, la carta que escribió en Nueva York y que está contemplada dentro de Las Escenas Norteamericanas, una interesante nota acerca de la lectura, los lectores y los lecturistas. El diario caraqueño en su edición del 4 de noviembre de 1881 anuncia a su público que, en vistas de contar con una serie de originales constituidos por correspondencias, artículos, producciones literarias, noticias, anuncios y documentos oficiales y, muy a pesar del poco espacio para publicarlas, se establecerá en el diario una columna que llevaría el nombre de Sección Constante. Que su edición sería diaria y, en ella, expresadas con moderación, sencillez y humildad, tendrían cabida diferentes temas. El 4 de noviembre de 1881 aparece la primera “Sección Constante, historia, letras, biografía, curiosidades y ciencia”. Trata diversos temas de las áreas de política, literatura, asombrosos viajes, curiosidades, moda, vida citadina en Nueva York, todos vistos por José Martí desde un punto de vista crítico. Dicha columna llegó a incluir 112 artículos, notas breves de carácter muy objetivo. En junio de 1882, Martí culmina su trabajo como corresponsal de La Opinión Nacional en Nueva York.
Caracas, 12 de junio de 2021